Crisis ecológica y... ¿matrimonial?
Ya he terminado el libro del club de lectura. Me ha encantado la verdad. Estoy deseando empezar a comentarlo con M y V, aunque no sé si será buen momento o no. Ayer V me llamó al trabajo, cosa que me extrañó muchísimo, y lo que me contó me dejó boquiabierta. Resulta que el marido de M fue al hospital a pedirle a V las recetas para la migraña ¡y le echó los trastos! Cuando me lo dijo casi se me cae el teléfono de las manos. A ver, yo de éste hombre me puedo esperar casi todo, pero esto... si M se entera le va a dar algo. Aunque la pobre no sé cómo lo aguanta. Hace dos semanas me contó una de sus batallitas: se había ido de cena de negocios el jueves y regresó a casa el sábado por la mañana. Me hace a mi eso mi marido y salen él y sus cosas por la ventana.
No sé si V se lo contará o no, yo la verdad es que no sé es buena idea o no. M es muy sensible... Aunque, por otra parte, el tio es un cabrón (con todas las letras). A ver, si quieres liarte con alguien y no quieres que tu mujer se entere, no le tires los tejos a su amiga. ¡Es de cajón! Aaaay... estos hombres de hoy en día ya no saben ni poner los cuernos. Menos mal que V supo frenarlo a tiempo. Madre míaa... ¿¿pero este hombre no se da cuenta?? Tiene un regalo en casa y dos hijos que son dos soles. No ve lo que puede perder.
Y aquí estoy yo, entre la crisis ecológica y la crisis matrimonial -yo siempre en medio de todo-. Tendré que hablar con V para no meter la pata (una de mis especialidades).
Vaya semanita nos espera...
Fdo. P
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trastofo_1 -